Por Adriana Fernandez Vecchi

IDEA 1 |
DIA DE LA DIVERSIDAD

Es fundamental conmemorar el 12 de octubre como el Día de la Diversidad, un reconocimiento que promueve el respeto y la valoración de las distintas culturas y formas de vida. Esta fecha invita a reflexionar sobre la historia y las diversas realidades que coexisten en nuestro mundo, lejos de la narrativa que a menudo ha celebrado la colonización y la homogeneización cultural.El Día de la Diversidad nos recuerda que cada cultura tiene su propia riqueza, sabiduría y contribuciones únicas a la sociedad. No debe ser recordado como el bien del colonialismo. Mas bien es la oportunidad de fomentar un espacio para el diálogo intercultural, donde se puede aprender y crecer a partir de las diferencias. Este enfoque no solo respeta la herencia de los pueblos originarios y sus luchas, sino que también celebra la diversidad como un valor esencial para la convivencia pacífica y el desarrollo social.
Promover el respeto hacia las distintas identidades culturales nos ayuda a construir un futuro inclusivo, donde todas las voces sean escuchadas y valoradas. Así, el 12 de octubre se transforma en una oportunidad para reafirmar nuestro compromiso con la diversidad, reconociendo que en nuestras diferencias radica la fortaleza de la humanidad.

IDEA 2 |
A PROPÓSITO DE LOS CONTINUOS PEDIDOS DE DOMICILIARIA
A LOS PRESOS POR DELITOS DE LESA HUMANIDAD

Dar la domiciliaria a presos por delitos de lesa humanidad es un tema altamente sensible. Estos delitos, que incluyen torturas, desapariciones forzadas y genocidio, representan violaciones graves de los derechos humanos y afectan profundamente a las víctimas y sus comunidades.
Conceder la domiciliaria a individuos condenados por tales crímenes es percibido como una falta de justicia y un desprecio hacia el sufrimiento de las víctimas. La impunidad y la minimización de estos delitos pueden perpetuar el dolor de quienes han sido afectados y de la sociedad en general y socavar la confianza en el sistema judicial.
Es crucial que cualquier decisión sobre el encarcelamiento o la liberación de estos individuos se tome en el marco de un proceso judicial riguroso y transparente, garantizando siempre el respeto por los derechos de las víctimas y la búsqueda de verdad y justicia. En este sentido, se debe priorizar el derecho de las víctimas a recibir justicia y reparación, asegurando que no haya espacios para la impunidad en casos tan graves.

IDEA 3 |
EL ESTUDIANTAZO CONTRA EL VETO

La universidad, como bien público social y derecho humano, desempeña un papel fundamental en la construcción de sociedades más justas y equitativas. Este espacio académico no solo se dedica a la formación profesional, sino que también actúa como un catalizador para el desarrollo sustentable. Al proporcionar educación accesible y de calidad, la universidad fomenta la inclusión y el empoderamiento de las comunidades.
La lucha estudiantil de 1918, que abogó por una universidad más cercana a la sociedad y al servicio de todos, sentó las bases de una educación más democrática. Este movimiento buscó romper con elitismos y promover un modelo educativo que respete la diversidad y las necesidades de cada individuo. En este contexto, la universidad se convierte en un lugar estratégico para generar conciencia sobre los desafíos sociales y ambientales que enfrenta el mundo actual.
Al integrar la sostenibilidad en sus programas académicos y actividades, las universidades pueden contribuir significativamente al desarrollo sostenible. Esto implica no solo formar profesionales capacitados, sino también ciudadanos comprometidos con la transformación social y la protección del medio ambiente. Así, la educación superior se alza como un pilar esencial en la búsqueda de soluciones innovadoras que permitan construir un futuro más equitativo y sustentable para todos. Esto mismo están hoy haciendo los estudiantes al reaccionar contra el veto.

Las tres Ideas es un llamado al pensamiento crítico y a buscar un pasaje de esperanza contra la insensatez.