Por Juan Latrichano
La semana pasada los precios tuvieron alzas significativas. No creo que la inflación de agosto sea del 5% como se viene anunciando. Además los medios masivos informan que la devolución del IVA hizo bajar los precios. ¿Dónde ocurrió está baja? ¿Estaré tan mal que no la percibo? ¿O será que la mayoría de los periodistas hacen la gran Majul, quien recientemente declaró que no había analizado lo que había ocurrido en los últimos años?
Además se esperan nuevas remarcaciones en la semana entrante. Si todo esto es así la devaluación quedaría prácticamente licuada.
Mientras tanto el Gobierno prepara el plan bomba. En efecto incrementa el gasto y/o reduce la recaudación fiscal para seducir electores. Las consecuencias las pagará el Gobierno que se haga cargo el 10 de diciembre. Se va activando la bomba.
¿Qué medidas deberían adoptarse?
La suba de las retenciones a la exportación, especialmente de alimentos. Las mismas eran y son de 4 pesos por dólar. Con el dólar a 40 eran del 10%. Por lo tanto deberían subir a $ 6. Desde luego con esto se financia parte del gasto social y se evita una parte del traslado a precios. A su vez se debe eliminar la pauta de 10 años para el ingreso de divisas provenientes de exportaciones. El país en llamas, el pueblo pagando las consecuencias de la devaluación, y los grupos de poder especulando.
Una administración acorde del comercio interior y exterior urge.
En el mientras tanto se nombra al frente de Hacienda al señor LACUNZA. Sus pergaminos son haber dolarizado la deuda de la provincia de Buenos Aires logrando con ello una suba fenomenal de la misma. Sin embargo algunos colegas dicen que es un buen profesional.
Perdónalos Señor, no saben lo que dicen.