Por Daniel do Campo Spada
Ante una cantidad interesante de personas, los Licenciados Ricardo E. J. Ferrari y Daniel Accorinti dieron el Primer Simposio del Centro de Investigación Académico Latinoamericano (CEDIAL) discurriendo sobre el mundo del trabajo y el sistema capitalista. En el primero de los casos la exposición partió desde la psicología y en el segundo desde el análisis de El Capital de Carlos Marx como base teórica.
Ante una nutrida presencia que se dio cita en el Bar Criterio del barrio de Flores en la Ciudad de Buenos Aires, Accorinti invitó a una real lectura de la obra de Marx, ya que entiende que se habla de ella pero que no se la conoce y mucho menos en profundidad. Mencionando al “gurú” (palabra que al orador le causa mucha gracia) Peter Drucker, autor de la obra La Sociedad Pos capitalista dijo que en la mayoría de los casos se cita a la obra del filósofo alemán sin conocerlo en profundidad.
En el corolario de su alocución reflexionó que el sistema educativo universitario adolece de una profunda carencia de formación, soliviantando las lecturas con consecuencias graves como es el de desconocer la magnitud de El Capital. Desde el público presente aportaron que no solamente los estudiantes tienen carencias, ya que habría que incluir a los docentes en ese estado de situación.
Ricardo E. J. Ferrari, por su parte, expuso su paper (publicado por CEDIAL – Paper Nº 1. https://cedial.com.ar/category/paper/ ) en relación a la dualidad del sufrimiento y el placer en el trabajo. En el escenario hizo un extenso recorrido de la conceptualización que el humano le da a las tareas cotidianas, que van desde los escritos bíblicos hasta los filósofos contemporáneos. El trabajo es central en la existencia del ser y marca en mucho los parámetros de quienes somos. En este caso, una de las preguntas del público presente fue la interesante paradoja del sentido culposo cuando se siente placer en el trabajo, a lo que Ferrari respondió aclarando que la respuesta ameritaba un desarrollo mayor que requería un tiempo superior al disponible.
Los presentes cerraron el evento con un caluroso aplauso de agradecimiento a los oradores por lo interesante de sus exposiciones, quedando todos los presentes con muchas ganas de seguir preguntando.
Gratificante poder compartir este espacio con todo el grupo CEDIAL, una experiencia de aprendizaje entre los exponentes y el público presente.Nos vemos en la próxima!
Es interesante el abordaje de Daniel Accorinti: mostró cómo la dominación no se ejercía sólo con la acción de los medios hegemónicos sobre el imaginario del ciudadano común sino que, en el medio académico, se daba valor de verdad a las afirmaciones de autores (Daniel lo ejemplificó con los dichos de Peter Druker citado en todas las unidades académicas como uno de los más importantes “gurúes” del neoliberalismo)que usamos para ilustrar la diferencia entre la “doxa” y la “episteme” de los griegos. Se concluía que Marx era un autor criticado y no leído por los profesores de economía. Quisiera referir que TAMPOCO leen a Adam Smith que llegó a decir que “es la equidad, la que exige, además de aquellos que alimentan, visten y alojan a la población al completo deban tener una participación en el producto de su propio trabajo” y, además, que la tasa de ganancia “es naturalmente baja en los países ricos y alta en los países pobres, y es más alta que nunca en los países que están yendo rápidamente a la ruina”.
La exposición de Ricardo Ferrari abordó el trabajo como una dialéctica de placer y sufrimiento. Citando a un filósofo coreano de Friburgo (Byung Chul Han) recuerdo que este autor plantea la pérdida de tal dialéctica en el marco del neoliberalismo en el cual “cada uno pasa a ser patrón de sí mismo” en un mundo en el que el misterio está eliminado, en el que han caído todos los velos. En el que se ha reemplazado el erotismo por la pornografía.